2/27/2011

REFLEXIONES MARCIANAS



Durante el mes de Marzo y con motivo de la celebración del día de la mujer trabajadora, mejor dicho el día de todas las mujeres; publicaré escritos acompañados de viñetas que espero sirvan para reflexionar sobre el momento que estamos viviendo.
He aquí la primera:
(comentarios al mail magoladibujos@yahoo.es)

La historia más extendida sobre la conmemoración del 8 de marzo hace referencia a los hechos que sucedieron en esa fecha del año 1908, cuando murieron calcinadas 146 mujeres trabajadoras de la fábrica textil Cotton de Nueva York, en un incendio provocado por las bombas incendiárias que les lanzaron ante la negativa de abandonar el encierro en el que protestaban por los bajos salarios y las infames condiciones de trabajo que padecían.

Prefiero utilizar la palabra conmemoración, teniendo en cuenta los fatales hechos que han desembocado en huelgas y protestas femeninas, no creo que sea conveniente hablar de celebración.

Por otro lado, las mujeres siempre hemos sido trabajadoras y el trabajo dentro del hogar no tiene menos mérito que el que se hace fuera. Seguimos midiendo nuestro mundo femenino con los parámetros que nos han impuesto los hombres.

Los hechos sangrientos son propios de machos y sobra decir que quienes lanzaron las bombas incendiárias lo eran. Las mujeres somos más reflexivas y normalmente pensamos en nuestros actos y en sus consecuencias, y estas; suelen extenderse a hijos pequeños, padres mayores e incluso, mascotas, que pueden depender de las personas a quiénes vamos a atacar, eso nos hace parar y pensar. Sin embargo los hombres piensan en eliminar el origen del mal y les da igual los daños colaterales, podría poner mil ejemplos, pero voy a utilizar uno muy reciente: Gadafi.

No voy a hacer incapié en las diferencias entre hombres y mujeres, porque es evidente que no somos iguales, está claro que las mujeres en cuestión de sentimientos somos superiores.